viernes, 8 de abril de 2011

Hay días que las palabras son cortas para expresar lo que se siente, hay momentos vacios y tan llenos de nostalgía, melancolía...

Desaires

Sé que en cada paso estás,

Acompañándome cual ángel celestial

Dándome la fuerza y la esperanza que a veces se pierden

Gritándome o aplaudiendo cada escena de mi vida.

Hay días en los que te sueño y te abrazo

Te agradezco lo que diste y me pongo a llorar

Como un niño, sin consuelo, cabizbajo y con la mirada perdida

Te vuelvo a buscar y ya no estás sólo que da de ti esta foto y el recuerdo.

La vida es a veces un acto repentino, la muerte llega en su momento

Fría y sin piedad nos convoca y sin una explicación aparente, ella siempre tan egoísta, te lleva,

Quien sabe a dónde o porqué, pero en silencio debes aceptar el destino,

Te vas sin despedirte, sigues el sendero que te llama

Y aquí nosotros tenemos que resignarnos a vivir sin ti.

Como evitar el extrañar tu sonrisa, tus bromas, tu voz y tu risa

Como no echar de menos esa paz y armonía que traias en la mirada…

Como no pedirle a la muerte que no sea egoísta y te deje con nosotros una noche más,

Una vida o una eternidad sería mejor…

Me duele tanto el no haberte dicho tantas cosas,

Me lastima este vacío que dejaste

No hay forma de llenar el vacío que dejó tu voz,

No hay escena que este completa sin tu estelar participación.

No hay comentarios.: